Foto por Azrael |
Hoy, 22 de septiembre de 2012, cumplo un año de haber regresado a mí Venezuela y sólo tengo una cosa que decir al respecto:
WOW!
o como decimos aquí, en mi patria cuando algo nos agarra por sorpresa:
¡Mierj!
¡Qué viaje ha sido este año! Creo que el mejor en los 29 años que tengo caminando por el mundo.
Aún recuerdo las últimas semanas en el frío norte, con mi familia y amigos. Los casi tres años que pasé por allá me enseñaron muchísimas cosas y es algo que jamás olvidaré y las lecciones aún están muy frescas para poder compartirlas.
Empezando por el hecho de que creo que las "lecciones de vida" no pueden ser compartidas realmente. Es decir, yo nunca podré enseñarte lo que aprendí y esperar que sea una lección para ti, sólo puedo contarte y cuando vivas algo semejante, aprehenderás y aprenderás una lección para tú vida. (Sí, con H intercalada porque son dos cosas diferentes).
Como un muy breve resumen, puedo decirte que todos los ámbitos de existencia han sido tocados este año. Caracas para mí ha sido la ciudad de reencuentros.
Nunca vi el videíto ése, Caracas: Ciudad de Despedidas, nada más con ver la reacción de las personas me pareció que fue una GRANDIOSA idea, TERRIBLEMENTE ejecutada, y quienes han discutido el tema conmigo saben a qué me refiero.
Por encima del video, este año y esta ciudad, para mí, han sido de reencuentros. Encuentros con mi familia, amigos, con el pasado, con nuevos empleos, nuevos proyectos, nuevas personas pero más importante, conmigo mismo.
He aprendido mucho de mí, y cada vez me doy cuenta que aún me falta mucho camino por recorrer pero la visión es otra, la actitud es otra y las lecciones son otras (al menos eso espero, porque si son las mismas quiere decir que no aprehendí nada jajaja).
El próximo año, el que empieza hoy, se ve prometedor. Tiene muchísimo potencial pero, para ser 100% sincero contigo y conmigo, no lo veo muy claramente. Lo veo algo borroso, empañado, como quien mira a través de unos lentes con prescripción ajena...
Eso me pone a pensar y, mientras escribo estás palabras, me doy cuenta que el futuro...
requiere de una nueva perspectiva.