Fuente: Instagram de AzraelCcs |
Para interrumpir el inmenso break que me he tomado de este blog y para volver al tono pajú'o que me caracteriza hoy voy a exponer mis pensamientos y además te diré cómo debes vivir tu vida.
No te resistas, tengo razón.
Creo que hoy evitaré los rodeos de siempre y entraré directo en el tema en cuestión comenzando por recordarte esa mala experiencia que tuviste en el "amor" y que te llevó, en algún momento de tu vida, a decir las palabras que me han sacado la piedra desde el primer momento que las escuché: "Quiero a alguien que me quiera como soy" acompañado del trágico y novelero "¿será eso mucho pedir?" y a continuación te pierdes en un monólogo que explica todas tus virtudes y experiencias que han hecho de ti la persona tan maravillosa que crees ser. Cuando en el fondo tanto tú como yo sabemos que, citando a Los Amigos Invisibles, You, are, like Everybody Else.
Nos ha pasado tanto a hombres como a mujeres pero para evitar redundancias de género, hablaré a "ellas" por ser quienes han venido a decirme estas palabras con mayor frecuencia. Pero esto aplica para ti también "macho vernáculo" o como quieras que las mujeres se refieran a ti para compensar por tus deficiencias en el tango horizontal.
Es importante acotar que desear ser querido como uno es, no tiene nada malo, lo malo es creer que la persona que eres es suficiente para atraer al Adonis ideal que tu imaginación considera apropiado para quererte como eres.
Una vez que dices esa frase devastadora, cuestionas el valor de tu requerimiento y expones todas tus bondades viene la parte más interesante para mí: el momento donde tu Adonis toma forma. Cuando por fin te callas, digo, guardas silencio en un momento de contemplación de tu pasado reciente, llega mi turno de decir algo y por lo general siempre hago la misma observación:
"Oye, [Inserte nombre del Friendzoneado de turno] te quiere como eres"A lo que respondes, todas responden igual, "Uy, pero él es mi mejor amigo, además el no es mi tipo"
Ya has cerrado la etapa de Autoglorificación y empieza la etapa del Merecimiento, aquí es donde creas un listado de aquello que constituye tu Adonis personal, lo que la vida te debe por tus penas y esfuerzos.
Por lo general, el discurso va algo así: "Sólo quiero un chamo que me quiera como soy, que sea simpático, que me haga reír, que no sea bruto pero que no sea aburrido, que tenga sus intereses pero que comparta algunos míos, que sea bueno en la cama eso no puede faltar" - mientras te ríes con picardía porque en el fondo todas y todos queremos buen sexo - "que sea buena persona, no tiene que ser perfecto porque yo no soy perfecta, pero nos debemos comprender en los momentos difíciles y me debe gustar físicamente".
Palabras más, palabras menos, algunos cambios aquí y allá y la descripción de tu hombre ideal esta completa.
Luego de listar todas tus maravillosas cualidades y las maravillosas cualidades de tu Adonis es cuando yo llego a la misma conclusión: Ese Adonis no quiere una mujer como tú.
Adonis tiene todas las de perder contigo pero no porque seas una mala muchacha, o seas fea, sino porque olvidas que así como tú lo tienes a él de modelo, él también tiene su versión ideal Afrodita como modelo de la mujer a quien él quiere que lo quiera como él es.
Y déjame decirte, que tú no encajas en ese estuche mamita.
Aquí es donde yo te digo cómo debes vivir tu vida:
Ya tienes identificado cómo es tu Adonis, eso es bueno porque te da un objetivo que alcanzar. El segundo paso es hipotetizar sobre cómo ha de ser la Afrodita que él espera encontrar y el tercer y último paso es convertirte en ella. De no conseguirlo, el cuarto paso es aprender a querer como él es a quien ya te quiere como tú eres mejor conocido como [Inserte nombre del Friendzoneado de turno].
Ahora, yo la verdad no apoyo mucho esta visión, pero debes admitir que es la única conclusión lógica a todos tus problemas amorosos del pasado.
Yo creo que la mejor manera de conseguir a alguien que te quiera como eres, es aprender a quererte como eres.
Nadie quiere a una persona que está buscando afuera lo que le falta en ella. Mi consejo para ti es que en lugar de esperar que te quieran y crear a tu Adonis o Afrodita personalizado, veas en ti misma las cosas que mas te agradan, en tu día a día busca las cosas que más te gustan, disfruta de ser quien eres sin esperar que alguien más valide tu persona al quererte.
Quiérete tú que tu Adonis ya se quiere él y no está buscando una media naranja con quien hacer jugo para la merienda, sino alguien con quien compartir el futuro.
Eso puede llevar a una relación de toda la vida o a une relación temporal, pero lo importante es que serás tú quien se quiera como es y más nadie puede quererte así.